Ahora que el otoño se va volviendo más frío hay gente que se enfunda en miles de capas de ropa para evitar la humedad, el viento y las bajas temperaturas, así pues, es momento de lanzar unos consejos para que vuestras salidas en bicicleta durante el otoño y el invierno que poco a poco se acerca, sean lo más placenteras posibles.
Antes de todo hay que entender que ante las inclemencias del tiempo cada uno responde de una manera diferente, hay quienes van mejor en verano, otros bajo el tórrido calor de agosto y los hay que nadan como pez en el agua bajo lluvia, viento o frío.
La adaptación de cada cuerpo es innegable, pero para que nos sea lo más llevadero posible y podamos disfrutar en la próxima estación que se acerca, queremos mostraros algunas premisas que debéis tener en cuenta antes de lanzaros a la carretera o la montaña a dar pedales en vuestras bicicletas.
Lo primordial es tener en mente las prendas que debemos usar y sus características, tejidos y cualidades para aprovechar al máximo sus cualidades a la hora de montar en bicicleta, porque cada prenda está destinada para una de las tres capas de las que os hablaremos.
Como bien sabemos la temperatura corporal ronda los 37° y al realizar actividades físicas, ya sea montar en bicicleta o cualquier otro tipo de deporte, esta aumenta de modo que obliga al cuerpo a transpirar en forma de sudor, para mantener dicha temperatura.
Esta afirmación es importante, pues lo primero que debemos lograr al vestirnos en invierno es lograr evacuar el sudor del cuerpo y mantenernos lo más secos posible, ya que de lo contrario la ropa húmeda aumentaría la sensación de frío.
De modo que lo que debemos hacer es cual cebolla, vestirnos con 3 tipos de capas diferentes, para crear una especie de burbuja de temperatura que nos permita mantener nuestro calor corporal mientras nos aísla de las inclemencias del tiempo, ya sean estas de lluvia, viento o frío.
- Capa 1. Esta primera capa es la que entra en contacto directamente con nuestro cuerpo y nos sirve para evacuar el sudor, por lo que debe de ser una prenda ceñida y que ante todo, no acumule humedad. En este aspecto, tejidos como el conocido CoolMax o el tejido Breath Hyper de Shimano, que además de evacuar el sudor aporta un plus de temperatura, serían buenos ejemplos, como ocurre con la lana merino, entre muchos otros materiales. Hoy en día se a demostrado que las prendas que aportan calor de forma rápida son una peor opción, como ocurría con el algodón hace algún tiempo, pues este absorbe rápidamente la humedad y como bien sabemos, tarda más tiempo en secarse.
- Capa 2. Una vez hemos logrado evacuar esa excesiva sudoración de nuestro cuerpo, la segunda capa debe ser la que nos sirva de abrigo y que retenga el calor del cuerpo sin retener excesivamente la humedad. Para ello nos valdría un maillot de invierno que nos aporte ese plus de confort. Hay quien usa todo el año maillots y culotes de verano y se colocan o bien perneras o manguitos para mejorar la temperatura y no tener que usar unas prendas específicas para los meses más fríos. Esto ya depende de lo bien o mal que cada uno lleve el frío, lo bueno de las perneras y manguitos es que si la temperatura ambiente aumenta podemos desprendernos de estas para no pasar calor.
- Capa 3. Esta capa es la más externa y expuesta a las inclemencias y será la encargada de parar el viento y la lluvia. El grosor de esta dependerá de nuestras preferencias, pero con un cortaviento no muy grueso puede ser suficiente si las capas inferiores nos son suficientes para abrigarnos. Aunque un cortaviento suele ser la opción más asequible recordemos que no transpiran en absoluto y bajo largas jornadas bajo lluvia o frío suele ser mejor usar prendas con membranas impermeables como el Gore-Tex o similares, que en ocasiones también incluyen algún tipo de capa de confort, que nos ayuda a mantenernos a una temperatura adecuada.
Finalmente recordemos que en el mundo del ciclismo menos es más, y ante todo debemos estar cómodos y usar prendas que además de protegernos y ofrecernos confort nos permitan una buena movilidad. Es muy importante que las prendas que usemos no se conviertan en un lastre ni en un obstáculo a la hora de pedalear y disfrutar de nuestras bicicletas.