Fliz, la bicicleta feliz

En ocasiones el mundo de la bicicleta y el diseño, están reñidos, en otras van de la mano y en contadas ocasiones logran dejarnos perplejos con sus propuestas.

La que hoy os traemos es justamente una de estas últimas opciones. Para los menos curiosos, el origen de la bicicleta, hasta la que hoy día conocemos empezó con la draisiana, que a excepción de las dos ruedas poco se parece lo que hoy usamos para desplazarnos. Pues bien, desde clootbike estamos seguros que el modelo Fliz, que aquí os traemos, está inspirado de alguna manera en aquella primera bicicleta sin pedales. El concepto que nos muestra Fliz con su diseño es aquel originario en el que el movimiento procede de los pies, sin mayores engranajes.

Como se puede ver en las imágenes, el cuadro de la bicicleta en lugar de alojarse bajo de nosotros, se ubica encima, por lo que debemos colgarnos literalmente de él para poder usar este curioso artilugio. En cuanto a los materiales, opta por el carbono para dar ligereza y flexibilidad al conjunto, que se completa con unos frenos de disco y un par de ruedas, nada más, pues prescinde de cualquier otro tipo de elemento.

Actualmente Fliz es un mero proyecto de unos jóvenes diseñadores y que a simple vista todavía le quedan aspectos que pulir, pues a simple vista se nos plantean algunas dudas:
– ¿Será fácil colgarse de la bici?
– ¿Habrá dificultades en aparcar la bicicleta debido a sus dimensiones?
– ¿Creéis igual que nosotros que eso de llevar los pies colgando hacia atrás estaría mejor si hubieran puesto unos reposa pies?
– ¿Sufrirá la espalda en esa posición?
– ¿Y si paramos en un semáforo, podremos ponernos erguidos?

Y a ti ¿Qué dudas te sugiere el diseño?